He
tenido la paciencia de leer y revisar cuidadosamente cada uno de los planes de
gobierno de los nueve candidatos a la presidencia del Gobierno Regional de
Amazonas. Un denominador común que logro observar es que la mayoría apuesta por
programas de desarrollo que toman en cuenta el Proyecto Educativo Regional y
resalta observar que todos ellos coinciden en que la educación es una de las
bisagras del desarrollo regional. Recordemos que Amazonas es parte del proceso
de descentralización de la gestión pública, hoy cuestionada en otros espacios
del país, y sin embargo en educación tenemos avances importantes, qué duda
cabe.
Veamos,
la gestión regional 2003 – 2006, apostó
por la construcción del Proyecto Educativo Regional y el Plan Regional de
Acción por la Infancia y Adolescencia, la gestión regional 2007 – 2011, oficializó
ese Proyecto y dio a luz al primer proyecto de inversión pública (PIP), “Mejoramiento de la calidad educativa en 12
distritos de Amazonas”, además de otros proyectos no menos importantes, y el
actual gobierno 2010 – 2014, apostó por el PIP, PLANMCYMA y el Colegio Mayor
José del Carmen Marín Arista. Sin lugar a dudas que lo hecho no es suficiente,
se requiere mayores esfuerzos que focalice no solo a la Primera Infancia, sino
también a los adolescentes y los jóvenes de la educación secundaria y superior
no universitaria y universitaria.
A
la nueva autoridad regional le esperan, entre otros, tres grandes desafíos de
cambio educativo: Modernización de la gestión educativa, mayor presupuesto al sector y desarrollo de
innovaciones y buenas prácticas educativas.
La
modernización de la gestión implica fortalecer la gestión de las UGEL, dar pase
a la creación de la UGEL Chachapoyas, generar la autonomía presupuestal y
convertirlas en ejecutoras a 04 de ellas (Bongará, Luya, Rodríguez de Mendoza e
Imaza-Bagua); con respecto al presupuesto se debe asegurar para el año fiscal
2015 y los próximos años, presupuesto de la fuente de financiamiento del Fondo
de Compensación Regional (FONCOR) asignado al sector, vía gasto corriente, para
continuar con proyectos exitosos, que tengan en cuenta toda la Educación
Básica, sin contraponer o dejar de lado, lo que actualmente viene trabajando el
Ministerio de Educación; y finalmente, un gran desafío es apostar por la
construcción de nuestro propio modelo de desarrollo educativo sobre la base de
aquello que ya es exitoso y que está contribuyendo a mejorar la calidad
educativa, por eso, considero que hay que construir desde la investigación e
innovación educativa, un laboratorio de innovaciones y buenas prácticas
educativas. Hay que identificarlas, organizarlas, sistematizarlas y difundirlas
como gestión de conocimiento educativo y compartirlas en todo el ámbito
regional.
La
educación de nuestro país es compleja, se requiere de una tarea conjunta, entre
los estamentos del Estado y la sociedad civil. Los candidatos tienen la
palabra.