lunes, 25 de octubre de 2010

UNIDOS CONTRA EL HAMBRE


Mil millones de personas sufren de hambre en el mundo


El 16 de octubre fue el día mundial de la alimentación. Jacques Diouf, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), ha dicho que debemos tener “vergüenza moral” por tantas personas que sufren hambre en el mundo y que hoy bordean los mil millones de personas, de los cuales 578 millones viven en Asia y el Pacífico, 239 millones en África Subsahariana, 53 millones en América Latina y el Caribe, 37 millones en el Oriente y el Norte de África y 19 millones en países desarrollados, al respecto la FAO estima que la producción agrícola mundial necesita crecer en 70% para alimentar a los 9,000 millones de personas que habitarán el planeta en el año 2050. Por eso esta organización ha iniciado una campaña internacional con la finalidad de sensibilizar a los gobiernos y autoridades para que la erradicación del hambre sea la principal prioridad.

El tema Unidos contra el hambre no es una frase cliché, sino una frase escogida con la finalidad de reconocer los esfuerzos en la lucha contra el hambre a nivel internacional, regional y nacional. La unión contra el hambre se vuelve una realidad cuando el Estado y las organizaciones de la sociedad civil trabajen en conjunto para erradicar el hambre, la pobreza extrema y la malnutrición.

¿QUÉ ES EL HAMBRE?

Para los menos afortunados que no consumen suficientes alimentos todos los días, el hambre produce debilidad, cansancio, dificultad para concentrarse, incluso enfermedad. Para los millones de personas que sufren hambre, esta sensación dura todo el día, todos los días, salvo que nunca saben cuándo desaparecerá. El hambre puede enfermarlos y causarles daños irreparables a la salud. No tienen suficientes alimentos para estar activos y sanos, y no reciben todas las vitaminas y los minerales necesarios para que el organismo funcione bien. Esto es el hambre crónica, cuando el hambre es extrema y después de pasar días sin suficientes alimentos o sin comer, el cuerpo comienza a alimentarse de lo único que tiene: sí mismo. Descompone su propia grasa y sus tejidos, lo que conduce a la inanición y a la muerte.

¿POR QUÉ HAY HAMBRE?

Hay hambre debido a la pobreza: catástrofes naturales como inundaciones, sequías, etc., familias que no pueden reconstruir una vez producido el daño. Hay hambre porque en muchos países las mujeres no tienen tanto acceso como los hombres a la capacitación, el crédito o las tierras. Existe hambre por los conflictos, que despojan a la gente de la oportunidad de ganarse la vida dignamente y de alimentar a sus familias; personas pobres que no tienen acceso a tierras ni una infraestructura agrícola suficiente para producir cultivos viables o criar ganado; carecen de trabajo constante que les permitiera tener acceso de otra manera a los alimentos. Hay hambre porque las personas a veces usan los recursos naturales en forma insostenible, porque no hay suficiente inversión en el sector rural en muchos países para apoyar el desarrollo agrícola, porque las crisis financieras y económicas afectan principalmente a los más pobres al reducir o eliminar las fuentes de ingresos que les permiten subsistir.

¿QUIÉNES SON LOS QUE SUFREN HAMBRE?

La mayoría es población rural de los países en desarrollo ‒de las aldeas de Asia, África, América Latina y el Caribe‒ que vive principalmente de la cría de animales y la agricultura en pequeñas parcelas, con lo que satisface sus necesidades elementales de nutrición. Los que no tienen tierras pueden pasar todavía más hambre: viudas, huérfanos, ancianos, jornaleros, refugiados. Estas personas pobres del medio rural no reciben ingresos constantes y no pueden complementar su nutrición comprando alimentos. Muchas veces se van a las ciudades a buscar trabajo, que puede ser escaso y estar mal pagado. Pocos ingresos significan pocos medios para comprar alimentos en los mercados locales. Muchas veces las que más sufren son las mujeres, que están subnutridas durante los embarazos y pueden tener niños subnutridos.

¿QUÉ SE PUEDE HACER PARA COMBATIR EL HAMBRE?

El primer paso: tener una perspectiva común de un mundo sin hambre; poner fin a la desigualdad de género y habilitar a las mujeres para que participen más en el desarrollo agrícola.

Los pequeños agricultores deberían recibir las oportunidades y la instrucción necesaria para producir suficientes alimentos e ingresos para alimentar a sus familias.

Las economías rurales necesitan crecer para multiplicar las oportunidades de trabajo para los que las necesitan, y reducir la emigración hacia las ciudades; hacer más énfasis en mejorar el acceso de los pequeños agricultores a los mercados internos e internacionales. Los recursos naturales requieren una gestión mejor para asegurar que no se sobreexploten las tierras. Los sectores público y privado tienen que colaborar unidos para poner fin a la pobreza y la desigualdad, y para mejorar el acceso para todos a alimentos sanos.

ESTÁDISTICA DEL HAMBRE EN EL PERÚ.

Perú: 2005 – 2007
Población total: 28,2 millones
Nº Personas sub utridas: 4,3 millones
Prevalencia de subnutrición: 15%
Consumo diario de energía: 2430 Kcal.
Artículo publicado en el Diario AHORA, el día 14/10/10.
Columna: PROHIBIDO NO EDUCAR.

Fuente:
www.fao.org/